En momentos que los muertos y las dificultades por las que pasan los venezolanos que huyen de la crisis en su país aumenta, la ONU pidió el martes a la región —una vez más— que trate a esos migrantes como refugiados y no los deporte.
En un comunicado, el alto comisionado de la ONU para los refugiados (ACNUR) informó que al menos 3.7 millones de venezolanos han huido de su país en años recientes y que “dado el agravamiento de la situación política, económica, de derechos humanos y humanitaria” en Venezuela, la ONU “considera ahora que la mayoría de esas personas tienen necesidad de la protección que brinda el estatus de refugiados internacionales”.
Los vecinos de Venezuela han tenido que hacer frente a ese éxodo —uno de los mayores en la historia de las Américas— pero en lo fundamental los han recibido con los brazos abiertos.
“En la práctica, América Latina ha sido muy generosa con los venezolanos”, dijo William Spindler, portavoz de ACNUR. “Unos ocho o nueve países aceptan ahora los pasaportes venezolanos vencidos [como documento legal de identidad], hay muy pocos lugares en el mundo donde eso sucede”.
Además, aproximadamente 1.4 millones de venezolanos en la región tienen algún tipo de estatus legal temporal y 460,000 han solicitado asilo.
Pero ACNUR dijo que el mecanismo de solicitud de asilo en América Latina ha quedado abrumado por la situación y sugirió que los estados usen “determinaciones sobre la base de grupo” para ofrecer el estatus de refugiado, y no revisar los casos de los inmigrantes uno por uno.
Las nuevas guías subrayan la creciente crisis humanitaria en Venezuela, que obliga a la población a emprender viajes desesperados en busca de alimentos, medicinas y otras necesidades básicas.
Esta semana se conoció la noticia de que por lo menos 20 personas estaban desaparecidas —se presume que perecieron— cuando una embarcación zozobró en medio de la mar picada cuando trataba de llegar de Venezuela a Trinidad y Tobago.
El único sobreviviente parece ser el capitán de la embarcación. El 18 de mayo, Robert Richards, un estadounidense que vive en las Islas Vírgenes de EEUU, escribió en Facebook que encontró “al joven 30 a millas de la costa de Trinidad luchando por su vida en medio de la mar picada. Llevaba 19 horas en el agua”.
Richards dijo que no había señal de nadie más. “Que Dios bendiga a los que perecieron”, escribió.
Spindler dijo que tales incidentes subrayan la “desesperación” en el país y la razón por la que los venezolanos deben ser consideras refugiados.
Además de los huyen de la persecución política, “hay muchos que no son perseguidos pero que se marchan debido a la inseguridad, la delincuencia y los apagones”, dijo. “No podemos decir que estas personas son migrantes económicos… En Venezuela no tienen trabajo, comida ni acceso a los servicios médicos”.
La crisis se agrava en momentos que el país está trenzado en una batalla política. Estados Unidos y más de 50 naciones más reconocen a Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, como el presidente legítimo de la nación y exigen que Nicolás Maduro salga del poder.
Sin embargo, Maduro ha dicho que tiene el derecho a gobernar hasta 2025 y ha criticado duramente a la oposición tras un breve e infructuoso levantamiento cívico-militar el 30 de abril.
FUENTE: El NUevo Herald